domingo, 24 de enero de 2010

Día 16: El día del destornillador

Para variar, nos hemos tirado todo el día allí arriba. No ha hecho mal día del todo. Un poco de viento huracanado y poco más ;-)

Ahora que ya empezamos a pillarle la técnica y la maña a la perforación, ya nos tenemos que volver. Esa maña hace que no necesitemos tanta fuerza bruta para sacar las brocas de 100 mm de diámetro y llenas hasta las cejas de piroclastos congelados.

Lo peor es para vaciar cada segmento de medio metro!! Al estar todo congelado, hay que sacar el material a golpes, o con la hilti, o ... es lo que más tiempo nos lleva, sin dudas.

Poco a poco seguimos avanzando, aunque la geofísica nos plantea muchos problemas. Los piroclastos no hacen buen contacto y tenemos que echarle agua de mar y sal para empiece a funcionar. Cada día nos llevamos una garrafa de 25 litros montaña arriba, por la mañana y por la tarde.

Después de comer nos vamos Olga y yo nos vamos un poco antes. Miguel Ángel va un poco más tarde.

Desafortunadamente, cuando estábamos sacando la broca se cayó al agujero un destornillador que tenía William :-( Pepe se acerca a la base a coger un dedo magnético para intentar sacarlo. Desgraciadamente, cuando vuelve con él, el destornillador ha quedado 'sepultado' por el lodo en suspensión que se va decantando poco a poco. No lo podemos sacar.

Nos volvemos a la base buscando alguna solución que implementar mañana por la mañana. Creo que la única opción es seguir taladrando y esperar que se introduzca en la broca.

Víctor ha estado todo el día de maría. Se ha pegado una 'jartá' de fregar que pa qué!! A la hora de la comida también he estado ayudando un poco. Me auto-contraté como pinche de cocina de Almudena, una de las cocineras. Echamos un rato agradable mientras preparábamos los platos.

Los días van haciendo mella. Estamos muy cansados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario