sábado, 23 de enero de 2010

Día 15: Cal y arena al canto

Hoy sábado ha sido un día un poco agridulce:

- Por la mañana, éxito: perforamos hasta 3 metros recuperando buenos testigos de hielo. Nos bajamos contentos. Nos ayudaron Pepe (el jefe de la base, comandante del Estado Mayor) y Miguel Ángel (también comandante).

- Por la tarde, frustración: llegamos hasta 3.5 metros pero no pudimos recuperar testigos. La broca se queda inundada de agua y pesa mucho. Es preciso desmontarla a trozos para poder sacarla y esa manipulación hizo que se cayeran los testigos.

- Además, intentamos sacar lo que se quedó enterrada con ayuda de una Hilti, sin ningún éxito. También nos ayudan Pepe y Miguel Ángel.

Nos volvemos cansadísimos y derrotados mentalmente. Pero bueno, mañana seguro que tendremos éxito.

Nos han dicho que el barco se retrasa un día. No sé exactamente cuándo llegará, pero se dice que el martes por la tarde. Eso nos deja un día más de trabajo.

Además, este hecho tiene otra implicación más: como vamos a estar 1 día más, eso ya nos mete en la lista de personas que hacen marías ;-) Uno de nosotros tiene que hacer de maría uno de estos días. Víctor se ha ofrecido voluntario para hacerlo mañana.

Hoy sábado, siguiendo la costumbre de la base, disponemos de 30 minutos de conexión a internet para conectarnos a otros correos externos, ... Yo los he utilizado para subir algunos días al blog.

Después de la cena se ha hecho el tradicional karaoke de los sábados. También hay ratos para pasarlo bien, claro.

Por cierto, ya he cumplido uno de los objetivos que me marqué al venir: tomarme un whisky añejo pero añejo de verdad. Le he puesto hielo de un iceberg que llegó el otro día por aquí... o sea, una edad de más de 2000 años. Eso sí que es un whisky viejo, eh?

Mañana más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario